martes, 30 de marzo de 2010

Mi "no - experiencia" con Gerardo



A Gerardo lo conocí cuando iba en 4º medio y yo era una alumna de excelencia, él iba en el mismo curso pero en un prestigiosísimo colegio de la capital, coincidimos que nos preparamos en el mismo lugar para la PAA y ambos queríamos carreras relacionadas entre sí sin ser iguales, éramos unos pendex de 17 años que coincidimos no sólo en curso Preu y edad, sino que nacimos el mismo día del mismo año, pero él a las 8 am en la Clínica Las Condes y yo a las 17.10 app en un hospital público ... o sea, ambos de mundos sociales nada que ver ... pero congeniamos de inmediato, y mientras mis padres hicieron un esfuerzo sobrehumano para pagarme esa preparación, los de él le pasaban el auto y harto billete para que anduviera relajado, él era un as en la materia que más me costaba y viceversa, nos ayudábamos mutuamente y así nos hicimos super amigos. Gerardo no solo era el chico más encantador del mundo a los ojos de pendex de 17 años, sino que era el chico más guapo y exquisito de todos los pololos que yo había tenido hasta ese momento y los que había conocido ... y Gerardo tenía la película más que clara, se sabía exquisito, atractivo, encantador, masculino y un cheque de la lotería a fecha y ocupaba todo su encanto en conquistar chicas y no atarse a ninguna ... menos conmigo ... conmigo era de una manera que no era con las otras, se sinceraba, me conversaba como a un ser humano, reíamos, nos contábamos los secretos y fue así que conocí al chico, al hombre sensible y no al conquistador que era, y al suertudo le iba extremadamente bien, pues siempre el objeto de sus deseos caia rendida a sus pies sin atarse ... luego las dejaba porque no era de nadie y él valoraba su libertad ante todo ... y yo, como pendex de 17 años, estaba loca por él sin tener idea en esos años que Bellatrixxx existía en mí, recuerden que la reconocí ya siendo una adulta hecha y derecha como les conté en un post anterior del año 2009 ... bueno, Gerardo y yo nos hicimos tan cercanos que nos visitábamos en las casas, él iba a la mía en el auto precioso de sus viejos sin importarle lo lejos que yo vivía, y él me llevaba a su casa a disfrutar de la piscina linda que la gente ABC1 tiene, nada que ver con lo que nosotros teníamos que era de nivel más bajo que él, pero no le importaba, cayó bien con mi familia y a mí me quisieron mucho sus hermanos y padres ... bueno, la cosa es que yo estaba enferma de amor por él o lo que creía amor y ya había tenido encuentros sexuales con los pololos de turno que no habían sido muchos (la promiscuidad vino después) así que era la amiga pendex de otro pendex que vivía a full su vida, yo me iba en la volada mirándole el pelo cortito rubio precioso que tenía sobre todo cuando estaba empapado por la piscina de su casa, cuando se reía como que yo me iba al cielo y su mirar azul era increíble, lo miraba con ojos codiciosos cuando estaba en traje de baño y quería puro ser tocada por él, o sea, una cabra chica enamorada con esos amores que una idealiza ... bueno, pasó ene tiempo, y un día, pasada ya la PAA y ambos con nuestras carreras en universidades tradicionales me dijo lo que quería escuchar: se me declaró y me dijo que me quería hace mucho tiempo, que no había sabido como decirmelo porque nunca en su vida le había declarado a una niña su sentir, que quería abrazarme, apretarme fuerte contra él y otro montón de cosas que dice un pendex a la pendex que le mueve el piso ... imagínense como estaba yo, casi lloraba de felicidad pues Gerardo era (y así lo considero) el primer amor de mi vida, estaba con el alma en un hilo escuchando y esperando el momento oportuno para decirle que "si" pero me salió con otro pastelito que en esos momentos era imperdonable y que ahora entiendo perfectamente, porque en el fondo, ahora soy como él ya lo era ... quería que fuera su pareja, de eso no había duda, quería andar conmigo de la mano, besarme en público, presentarme a su familia y amistades como su polola oficial y todas esas cosas, PERO, el gran pero, era que por nada del mundo dejaría ese estilo de vida que ya llevaba, es decir, que seguiría saliendo con otras chicas no tan publicamente como lo llevaba haciendo pero sí de manera discreta para que no me compadecieran, dentro de su agenda y de su activa promiscua vida sexual me daba el "privilegio" de ser la primera siempre, por sobre las demás, aunque estuviera a punto de estar con otra y yo lo llamaba, él dejaría todo botado para disfrutar de ese "gran honor" que quería otorgarme ... mientras que con las otras tendría sexo, conmigo haría el amor ... como decía Arjona en esos días ... el por qué me daba tantos créditos y honor, era porque yo sería la "oficial", la amada, la única que tendría sus sentimientos y su corazón, la que su familia conocería y la que lo acompañaría en eventos sociales ... como yo era pendex enamorada, me puse a llorar y me fui, dejé al pobre hablando solo, Gerardo me siguió pero corté todo con él porque me sentí humillada, él me insistió ene, llamando por el fono, visitándome en la casa y siendo recibido por mis vejetes porque yo me negaba, m envió unos ramos de flores preciosos a la casa, las primeras que recibí, me visitó en la universidad y hasta allá hizo lo mismo que Ewan McGregor en "Big Fish" poniendo en las transparencias de las clases"Yo amo a Bellatrixxx" mientras los profes y mis compis de carrera se reían ... nadie entendía el por qué rechazaba con tanta fuerza a un chico tan precioso y perseverante, pero no podía dar las razones sin delatarlo ... y así al final, no dio más y todo acabó.

Años después, estando ya sola y entre mi primera y segunda pareja, entre Sam y Ed, siendo ya una mujer y profesional, me lo encontré ... vaya la sorpresa ... el tipo estaba nada que ver a como lo recordaba, estaba mil veces mejor, más alto, desarrollado, exquisito, con su pelo rubio igual de corto y con su voz más profunda, más varonil, increiblemente deseable y yo que estaba sola, había terminado la primera y la más importante relación de mi vida, ya con experiencia en el inframundo, estaba con la líbido alta con solo ver a un hombre tan increiblemente apuesto. Fue una sorpresa para él, una sorpresa increiblemente grata y también inesperada, me dio un abrazo de esos apretados que dan los exponentes ricos del sexo masculino para dar a entender que están bien dotados y tienen sangre en las venas, algo que me quedó más que claro al sentirlo y elevarme la líbido fuera de esta galaxia y hasta hacerme correr sudor por el cuerpo ... el tipo estaba exquisito hasta decir basta, su aroma era de perfume caro, onda "Allure sport" de Channel, su rostro perfectamente bien afeitado, ropa a la moda y con un terno impeque, imagínense a la persona que siempre han deseado tener pero con quien nunca concretaron, que siempre recordaron, convertido en una persona más deliciosa aún porque los años han pasado y hay madurez de todo tipo, el corazón me latía a mil por la lujuria pero tenía que aguantarmela, aunque yo noté que como éste ha sido siempre un cachero, también se aguantó sus deseos sexuales, me invitó a cenar así que fuimos y como Gerardo siempre ha sido ABC1 gastó ene $$ en un restaurante para puro impresionar, conversamos lo típico, entre comentarios y porque ya tenía experiencia en el inframundo lo que me ha servido ene para entender el mundo masculino, me dijo lo increíblemente preciosa que estaba (por no decir que estaba rica) y que le daba muchísimo gusto verme (es decir, que lo había calentado ene), que le traía lindos recuerdos de juventud (¿por qué no pude comerte, Bellatrixxx, si me tenías loco?), que ojalá pudiéramos vernos ya que no estábamos con nadie (ojalá ahora sí me digas que si porque quiero puro darte, muchas veces, porque me calientas ene y quiero disfrutarte como no lo hice antes) y que retomáramos esa amistad que tuvimos de pendex (o sea, ahora no hay impedimentos para tener una amistad con ventaja ya que somos adultos) ... me insistió mucho en lo linda que estaba y lo cambiada, lo estupendamente cambiada que estaba ahora, lo que es verdad, yo era una pendex que no me arreglaba, con problemas de autoestima pese a saber que era sobresaliente por sobre las otras niñas y media nerd al creerme el cuento de que era fea y le daba duro a los estudios ya que eran mi vía de escape (pero puchas que me han servido) ... su manera de mirar era puro joteo, tanta alabanza a las que ya estaba acostumbrada me tenían insensible y lo que más quería era estar con ese hombre tan exquisito y que siempre sentí ganas de interactuar con él ... pero me detenían mis típicos temores, de que podría volver a encontrarme con él, que lo conocía de hace ene, que no podía hacer el típico "si te he visto no me acuerdo", aunque no era la misma carrera están relacionadas y capaz que en una de esas me tocaría volver a encontrarme con él ... uuufff ... yo estaba afiebrada por él y con todos esos escrúpulos muy típicos de Bellatrixxx o de mi parte racional porque la Bella no es tan cerebral como yo ... yo estaba mojada entera por él y Gerardo estaba inquieto por lo mismo ... o sea, ahí estábamos un par de calientes uno por el otro pero ninguno decía nada más que las palabras de buena crianza para hacer grato el ambiente ... bueno, llegó la hora de irme y él, muy caballero, se ofreció para traerme a mi depa, algo que ustedes saben bien que yo no permito para mantener mi privacidad ante todo, y aunquen le agradecí le dije que no, Gerardo insistió, era tarde, el metro estaba cerrado, no me quedaba otra que pagar como 20 lucas el taxi por lo lejos, así que acepté haciendo lo que siempre hago, que me dejara en la esquina lejana para que no supiera donde vivo, así que entre música, el auto caro (un Audi último modelo), risas, la música de los 90`s que a los 2 nos gusta, llegamos ... me daba nervio despedirme de él porque sabía que me iba a besar, lo conocía lo suficiente como para saber ya que esas tácticas me las dijo él mismo siendo pendex y no creía que cambiaría, a mi me puede calentar mucho un tipo, pero si no estoy en el inframundo, no tomo la iniciativa, que ellos trabajen también y se la jueguen, después de todo, el premio es harto rico y solo los triunfadores lo obtienen ... así que pensando que será lo que tiene que ser, me acerqué a despedirme, y porque mi experiencia y lo vivido me han enseñado pasó tal cuál yo sospechaba, y me dio un beso muy delicado, cuidadoso, en la boca, era rico, me tocó el rostro con su mano grande, pero era muy precavido, como temiendo faltar el respeto y yo que caliente no pienso y soy media apurona, tuve que aguantarme las ganas y hacerme la niña buena para que no sospechara lo que he experimentado pues él tenía mucha experiencia, harto más que yo, el beso se profundizó al ser correspondido y era tan rico, tan rico, estaba tan mojada que sentía mi propio aroma y que me corría por las piernas mojándome las pantaletas, él me abrazó atrayéndome hacia su cuerpo increíble sin apartar sus labios de los míos, ambos respirábamos apenas, era realmente algo rico y eso que yo no dejo que me besen los labios exceptuando mis parejas, ahora estaba disfrutando de algo que deseaba hace años y era aliviador sentir esa sensación, no existiendo el sentir de cuando era pendex, se hacía todo más fácil, sentí que me ponía una mano por sobre la ropa en uno de mis pechos y casi me vuelvo loca de deseos, él lo supo y bajó sus manos para meterla bajo mi falda, yo ya no daba más con tantos deseos y estaba perdiendo la razón, yo también lo tocaba, era rico sentir su piel por sobre la camisa, su corbata perfecta era una molestia pero su calorcito y su aroma pasaba, tenía la piel suavecita, exquisita, bien cuidada, quería sentirla junto a la mía y disfrutar de ese hombre, bajé con mis deditos pequeñitos para tocar la parte más importante, obviamente él se acomodó para dejarse acariciar (ni tonto) sin separar sus labios de los míos, en el abrazo que me había dado horas antes ya había sentido algo, pero tocarlo con mis manos fue una grata sorpresa, a él le gustó y mucho, estaba excitado, listo, esperando que yo le dijera algo, le diera el sí pero él no había preguntado nada ni pedido nada, solo nos dejábamos llevar por el momento, sus manos eran ricas y suavecitas, me gustaba sentirlas pero yo quería sentirlo a él, no sé cómo, me tomó de la cintura con fuerza y me sentó sobre él, mis pepchugas quedaron frente a su cara y era lo que Gerardo quería, me besó la garganta, exquisito, nuestras respiraciones eran anhelantes, entrecortadas, llenas de deseo, me tocaba la espalda suavemente, me tocaba los pechos por sobre la ropa, me tocaba las piernas por debajo de la falda, exquisito sentir su miembro entre la ropa rozándome, quería puro sacárselo para que entrara en mi, estaba loca de tanta calentura, mi mente pensó en un atisbo de razón "sin condón no, Bellatrixxx" y sentí que él metía su mano entre nosotros para hacérmelo, pero le dije que no mientras no hubiera un preservativo de por medio, Gerardo me miró sabiendo que era imprescindible tener uno y entendió ... - ¿Sabes? creo que no ando con ninguno - me dijo con desilución y todo se derrumbó porque yo, siempre precavida y lista como buena scout, siempre traía uno o dos conmigo pero en esa cartera ¡¡nada!! ... pero antes que alcanzara a decir algo, me dijo que siempre había querido estar conmigo, que siempre había sido su sueño irrealizable y que lo que había sentido siendo pendex lo había acompañado esos años, yo me bajé de él, si no había protección entonces no estaba dispuesta a hacerlo sobre todo sabiendo su pasado promiscuo, yo también tenía mis historias, pero él no lo sabía, así que me daba la ventaja de alegar ante cualquier pasada de mano, el tipo estaba exquisito, para qué negar la realidad, era de esos hombres que me gustaban en la cama, así había supuesto, había sido un perfecto gentleman conmigo y muy cuidadoso, me había encantado su manera de desenvolverse conmigo ... - Bella, siempre has estado en mi mente, siempre he querido tenerte, siempre, desde que somos pendex ... ¿por qué me dijiste que no esos años? - empezó mientras nos acomodábamos - Gerardo, lo sabes bien, te lo dije en esa oportunidad, éramos cabros chicos y yo te quería solo para mi, no quería compartirte ... pero fue hace muuuucho años, así que olvidalo - le contesté mientras me peinaba, él me miró - ¿Sabes que estás tan preciosa que pareces un sueño? - me dijo y le sonreí por lo bonito que sonó, le dije que no podía hacerlo con él y entendió sin insistir, lamentando sí tan garrafal error, lamentandolo yo también porque estaba tan califa por él ... nos despedimos, me dio un besito rico en los labios, me bajé del auto ... llegué tan caliente al depa que creo que me bañé con agua fría y la evaporé.
Después ... después lo vi de nuevo ... después sí concreté ... pero esa es la segunda parte de esta historia.


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